Séneca y la brevedad de la vida
Hola, 👋
Para cortar la semana, te comparto 5 cosas que me dejaron pensando y 1 pregunta para masticar:
- Séneca meditando sobre la brevedad de la vida:
“No es que tengamos un espacio corto de tiempo, sino que desperdiciamos mucho de él. La vida es lo suficientemente larga y se nos ha dado en medida suficientemente generosa como para permitir la realización de las cosas más grandiosas si toda ella está bien invertida. Pero cuando se malgasta en lujo y descuido, cuando no se dedica a un buen fin, forzados al final por la necesidad última percibimos que ha pasado antes de que nos diéramos cuenta de que estaba pasando. Así es — la vida que recibimos no es corta, pero nosotros la hacemos así... ni nos falta, sino que la desperdiciamos”.
Si todo sale bien, vamos a vivir 80 años o más. Es muchísimo tiempo, casi dos veces más del tiempo que llevo acá. Sin embargo, nos pasamos quejándonos de lo rápido que pasa todo, de que ya terminó la semana y de que se acerca otro fin de año. Me pregunto, ¿qué efecto tendrá ese hábito en nuestra percepción del paso del tiempo? ¿No estaremos acortándonos la vida sin darnos cuenta? - Una carta de Séneca a su amigo Lucilio:
“Por lo tanto, Lucilio, hacé como me escribís que estás haciendo: tené cada hora en tu mano. Agarrate de la tarea de hoy y no necesitarás depender tanto del mañana. Mientras estamos postergando, la vida pasa rápido. Nada, Lucilio, es nuestro, excepto el tiempo. La naturaleza nos confió la propiedad de esta única cosa, tan fugaz y escurridiza que cualquiera que quiera puede despojarnos de ella. ¡Qué tontos son estos mortales! Permiten que las cosas más baratas e inútiles, que pueden ser fácilmente reemplazadas, se carguen en la cuenta después de que las han adquirido; pero nunca se consideran en deuda cuando han recibido algo de esa preciosa mercancía, ¡el tiempo! Y sin embargo, el tiempo es el único préstamo que incluso un recipiente agradecido no puede devolver”.
Tenemos tiempo suficiente, pero al mismo tiempo, cada segundo que pasa es irrecuperable. Ya no puedo invertir el último minuto en otra cosa que no sea formular esta frase. Pero sí puedo decidir dedicar el siguiente a crear esta otra. El tiempo pasará, es inevitable; queda en nuestras manos elegir cómo aprovecharlo. - El valor del esfuerzo, por Musonio Rufo:
“Si lográs algo bueno con trabajo duro, el trabajo pasa rápidamente, pero lo bueno perdura; si hacés algo vergonzoso en busca de placer, el placer pasa rápidamente, pero la vergüenza perdura”.
Empiezo a interactuar con Instagram. Se siente bien hacerlo. No demanda esfuerzo, ni físico ni cognitivo. Simplemente dejarse llevar y, a lo sumo, deslizar reiteradamente un dedo. Pero cuando me doy cuenta de que pasaron 40 minutos y sigo en ese modo, el placer desaparece por completo: “¿Qué estoy haciendo?”
Cuando me enfrento a una situación incómoda, hago todo lo posible por evitarla. ¿Podré desaparecer? Pero, una vez superada, el sentimiento es casi siempre el mismo: “Menos mal que terminé haciéndolo”. - Jason Fried aconsejando cómo superar el “bloqueo del escritor”:
“No escribas, hablá. No escribas, comunicá. Probablemente no tengas ningún problema para decir algo en voz alta. Entonces hacé eso en su lugar. Luego escribilo”.
Reflexiones como esta no siempre fluyen fácilmente de mis manos. Muchas veces, me encuentro paralizado, mirando la pantalla durante varios minutos, esperando que alguna pista surja como por arte de magia. Es en esos momentos cuando me levanto y comienzo a caminar en círculos por la habitación, intentando articular en voz alta mis pensamientos sobre el tema. Abracadabra. - “Escasa es la porción de la vida que vivimos. De hecho, todo el trecho restante no es vida, sino tiempo”. — Séneca
¿Qué podría hacer para agrandar la porción?
¡Buen provecho!
Rodri
Para masticar...
¿Cuánto de tu vida estás verdaderamente viviendo y cuánto estás dejando pasar?